Medicina China
La medicina china considera que el cuerpo está compuesto por energía y materia, y que la salud es el mantenimiento del equilibrio entre ellas. La enfermedad ocurre cuando se da un desequilibrio.
La energía, llamada Qi o energía vital, es el principio activo que forma parte de todo ser vivo.
Los tres motivos por los que puede haber una alteración del flujo de energía en el cuerpo y por tanto una enfermedad son: factores externos o ambientales, factores internos o emociones y factores de estilo de vida, como la dieta.
Mediante el uso de sus modalidades terapéuticas, la Medicina China estimula los propios mecanismos de curación del cuerpo.
Las prácticas utilizadas en Medicina China incluyen:
• Acupuntura y acupresión.
• Moxibustión (aplicar calor a puntos del cuerpo).
• Hierbas medicinales.
• Nutrición
• Masaje chino (Tui Na).
• Ejercicios como el Tai Chi y el Qi Gong (combinan el movimiento con la meditación).
El tratamiento de la Medicina China pretende restablecer ese equilibrio mediante un tratamiento específico para cada individuo.